Me gustas mucho, porque te puedo comentar de todo sin temor a cuestionamientos…
me gustas mucho, porque puedes acompañarme en mi soledad y compartir la tuya con la mía…
Me gustas mucho, porque tu voz puede calmar mi impulsividad y volver dulce al descontento…
Me gustas mucho, porque has sabido aceptarme (hasta ahora) como soy, siendo siempre una voz amiga…
Finalmente, me gustas mucho, porque quiero que me gustes, y en última palabra, porque hago lo que quiero (que me gustes)…